El 1 de enero de 1959 los guerrilleros del Ejército Rebelde ingresaron triunfalmente a
Santiago de Cuba, apenas dos años y trece días después que Fidel reiniciara la lucha
armada en las montañas de Sierra Maestra.
Ese día, desde el balcón del Ayuntamiento, Fidel declaró que se había logrado la
conquista definitiva de la independencia.
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